El Intendente electo, Francisco Azcué, se prepara para asumir el 11 de diciembre en Concordia. Los nombres del nuevo gabinete ya están definidos.
Eduardo Cristina, volvería a ser funcionario. Lo tentaron con Eventos. Habrá que esperar si le da el sí al Intendente electo.
De las actuales ocho secretarías, Azcué planifica reducir la estructura orgánica municipal a cinco. “No queremos achicar, sino eficientizar”, explicó una persona de máxima confianza del nuevo equipo de gobierno. La nueva estructura constaría de cinco secretarías: Gobierno y Hacienda; Desarrollo Humano; Desarrollo Productivo; Desarrollo Urbano; y Modernización y Planificación. En todas ellas, se absorberían las áreas hoy contenidas en las otras tres secretarías que quedarían afuera.
Para Gobierno y Hacienda, Azcué eligió a un joven que milita en las filas de la UCR, actualmente en un cargo local electivo e integrante de la conducción partidaria. Como responsable de Hacienda se eligió también a alguien con perfil joven, un contador que se desempeña en una entidad bancaria y que acompañó en silencio todo el proceso de campaña.
Del nuevo gabinete formarían parte quienes fueron adversarios de Azcué en la interna de Juntos. Héctor Galarza, contador de origen peronista que obtuvo poco más de 2.000 votos en las PASO del 13 de agosto, integraría el equipo de Hacienda. Julio Bogado, quien compitió con la agrupación Concordia Presente y consiguió la misma cantidad de votos, estaría en el área de Servicios Públicos, bajo la órbita de Desarrollo Urbano. Esta última secretaría quedaría a cargo de un reconocido arquitecto y urbanista de la ciudad que formó parte del equipo técnico de campaña. Para Obras Públicas, Azcué adelantó el nombre de Oscar Ramírez.
A Eduardo Cristina (ex funcionario crestista), que salió segundo en la interna, le ofrecieron el área de Eventos y a Leandro Lapiduz (UCR de extracción de Pedro Galimberti), un espacio dentro de Turismo.
En Desarrollo Humano, el nombre que se echó a rodar es el de Sebastián Arístide, un joven ingeniero agrónomo que proviene del sector productivo y con experiencia en trabajo social a raíz de su participación en CREA y en la delegación Concordia de la Fundación CONIN, del médico mendocino Abel Albino. En esta súper secretaría confluirían Salud, Deporte, Cultura, Educación y Desarrollo Social, todas como subsecretarías.
Para Salud, Azcué se inclinó por una joven médica especialista que forma parte del sistema de salud público provincial en un hospital de la ciudad que se destacó especialmente por su labor durante la pandemia. Para Cultura, ya adelantó que comandará el área Wally García, referente del Carnaval de Concordia, una de las fiestas más populares de la región.
En Educación circula el nombre de otra exprecandidata a viceintendenta, María del Carmen Trupiano, pero desde el entorno de Azcué aclararon que quien define su equipo será el propio Arístide. Para Deporte, Letra P pudo averiguar que se piensa en la kinesióloga Ivana Pérez, especialista en deporte y educación. Junto a ella trabajarían quienes forman parte actualmente de la gestión de Enrique Cresto, como el atleta Martín Méndez, quien ahora está al frente del área.
Desarrollo Social es un caso aparte, porque Azcué piensa en un equipo de gestión más que en una única persona. Considera el área de las más emblemáticas de su gestión bajo el objetivo que se propuso de “sacar a Concordia de la pobreza”. Con ese norte, repatriará desde Buenos Aires un equipo de concordienses que trabaja desde hace ocho años en la gestión de Horacio Rodríguez Larreta en CABA. Se trata de dos jóvenes mujeres que desarrollaron un programa de urbanización de la Villa 31, conocida ahora como Barrio Padre Mugica. “Queremos dejar de ser el área que reparte bolsas de mercadería para llevar un abordaje integral a cada barrio”, explicó a este medio Azcué.
En Desarrollo Productivo anticipó al ingeniero Roberto Varela como nuevo secretario, quien trabajará junto con el responsable de Turismo, Laureano Schvartzman, actual presidente del Colegio de Profesionales del Turismo. Para Modernización y Planificación, aún no tienen nombres definidos, pero este medio supo que será un área que manejará directamente el PRO.
La definición del ballotage del 19 de noviembre terminará de confirmar la nueva estructura. Los resultados ordenarán las prioridades, según explicaron. “Si gana Sergio Massa, el PRO se empieza a extinguir y seguramente habrá ascensos de radicales en su gabinete, como Gerardo Morales o Martín Lousteau. Eso nos da más poder a acá para renegociar algunos lugares que por ahora estamos cediendo”, confió una persona que conoce el pensamiento de Azcué, de extracción radical, militante de Evolución. “Gente del peronismo podría subir escalones, con más jerarquía, con más presencia en nuestro gabinete”, añadió. “Si gana Javier Milei va a ser una macana. Ahí el PRO duro va a tener más peso, se van a empoderar un poco más”, advirtió.
